Según Cáritas 6 de 10 infantes evaluados sufren carencias nutricionales, lo cual enciende las alarmas debido a la gran cantidad de niños desnutridos en Venezuela.

El número de niños desnutridos en Venezuela, cada día incrementa más, consecuencia de la grave crisis económica y los altos índices de escasez de alimentos que existen en el país. En ese sentido en el último trimestre de 2016 la fundación Cáritas de Venezuela decidió tomarle el pulso a la seguridad alimentaria en las 25 parroquias más pobres de los estados Vargas, Zulia, Miranda y Distrito Capital, en total se procesó datos de 818 niños menores de 5 años de edad, de los cuales 202 que representaron el 24,6%, presentan desnutrición aguda y otros 225 (27%) están en riesgo de padecerla ya que no tienen el peso adecuado para su talla, lo que totaliza que un 52% de los niños sufren carencias nutricionales.

Susana Raffalli, experta en nutrición, seguridad alimentaria y gestión del riesgo de desastres, explicó que el Sistema de Monitoreo, Alerta y Atención en Nutrición y Salud (Saman) que se propuso Cáritas pretende hacer un boletín mensual que, si bien no muestra la situación nutricional de toda la entidad, sí revela quiénes serán los niños desnutridos en Venezuela más afectados si continúa el problema de seguridad alimentaria en el país.

Cáritas de Venezuela, fundación asociada a la Conferencia Episcopal, evaluó peso y talla de 1.400 niños con 3 de los 6 criterios que avala el marco de clasificación integrada de la Seguridad Alimentaria en Emergencias Humanitarias (IPC, por sus siglas en inglés), que reconocen las agencias internacionales como Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, Programa Mundial de Alimentos y Fews Net.

La fundación seleccionó para este primer boletín solamente a 818 niños con edades menores a 5 años para ajustarse a este marco. El estudio determinó que los pequeños con desnutrición severa no tienen complicaciones clínicas, pero recibieron una consulta médica como parte del programa.

También evaluó la desnutrición crónica que trae retardo de crecimiento y que se comenzará a observar entre cinco y siete años. El índice se obtiene comparando la talla con la edad, y la información obtenida fue que 18,4% de la muestra padece desnutrición crónica. Raffalli aclara que en Venezuela no hay hambruna, citó como ejemplo a Yemen, Sudán del Sur y Nigeria; en este último país desapareció la franja de edad entre 0 y 5 años porque murieron de hambre,  sin embargo, luego de obtener estos resultados sí puede precisar que la muestra vista de forma global arroja que aquellas parroquias localizadas en las cuatro entidades están en alarma, según los parámetros que establece el IPC.

Acotó que se catalogó de esta manera porque casi 10% de la muestra tiene desnutrición aguda en sus formas moderada y severa, no obstante, se observó que  Vargas se clasifica –según la misma norma– en la categoría de crisis porque supera 10% de los niños con desnutrición, mientras que en Zulia se acerca a la emergencia, pues es de aproximadamente 15%.

Los niños menores de 2 años son el grupo de edad más afectado con una prevalencia de desnutrición aguda global de 22,1%, en comparación con el grupo de 2 a 5 años que es de 7,7%, reflejando que el problema alimentario data de al menos tres años atrás.

Por su parte Janeth Márquez, presidente de Cáritas Venezuela, agregó que estas estadísticas muestran una tendencia que debe ser abordada.

 “Si no intervenimos, estos niños que están en riesgo aparecerán desnutridos en nuestro próximo boletín mensual. Estamos informando sobre esta situación no para crear conflictos, sino para que empiecen políticas públicas y que se atienda a esta población”, afirmó.

Este estudio centinela viene acompañado, además de la detección, de un programa para la familia y la comunidad con jornadas de alimentación durante 3 meses para recuperarlos con vitaminas y nutrientes. También hay un proyecto de formación en alimentación, promoción de la lactancia materna y campaña de prevención de enfermedades para las comunidades.

Parte de las donaciones para comenzar este programa, que incluían 92 cajas de suplementos alimenticios provenientes de Chile, venían en el envío que el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria catalogó con el  estatus de “abandono legal”, dado que pasaron 30 días y el ente no presentó la documentación requerida, por lo que la encomienda se entregó al Instituto Venezolano de Seguros Sociales.

Las restricciones de la familia

De forma complementaria se entrevistó a 217 familias que accedieron a llenar un cuestionario que permitiera conocer cuáles de los 12 grupos de alimentos consumieron en las últimas 24 horas anteriores a la entrevista y qué estrategia la familia ha puesto en marcha para sobrevivir a la crisis.

El resultado arroja que 42% comió menos de 6 grupos de alimentos, lo cual se considera una dieta deficiente, y 52% mostró una dieta inadecuada, pues solo consumió entre 6 y 9 grupos de alimentos. Solo 6% comió 9 grupos de alimentos, lo cual se considera una dieta adecuada.  Las familias contestaron que los alimentos que más eximen de su dieta son carnes y pescado (37%), leche (18%), arepa (16%) y granos (13% hogares).

Raffalli acotó que en las entrevista se supo que 31% de los hogares ha tenido que vender bienes como sopletes o máquinas de coser, con lo que trabajaban y generaban ingresos o cocinas, para poder comprar comida.

También 31% de los hogares ha tenido que separar al grupo familiar para enviar a los miembros más vulnerables a alimentarse a otro lugar.

Este informe fue entregado a la Defensoría del Pueblo, al Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Ministerio de Salud, Fiscalía e INN. Cabe mencionar que la última vez que el Instituto Nacional de Nutrición publicó el informe de Vigilancia Alimentaria fue en 2007.

En Zulia 60% de los niños tiene anemia

La anemia se estudió solo en el estado Zulia en 80 niños que regresaron a consultas consecutivas, se encontró que 60% de los niños con determinación de hemoglobina, mostró algún grado de anemia, de estos, 21% mostró  anemia leve; 79%, moderada y no se registraron casos de anemia severa.

Con respecto a las preguntas sobre su situación de salud en las parroquias de los 4 estados (Vargas, Zulia, Miranda y Distrito Capital), 10% manifestó que tenía asma; 19%, escabiosis; 21%, problemas gastrointestinales; 4%, alergias; 2%, parasitosis, y 39%, problemas respiratorios.