saludEl gremio del sector salud en Aragua avizora el caos en el sistema de la entidad por falta de atención gubernamental.

La crisis se acentúa en el sector salud de Aragua, donde ya la caótica situación alcanza a la infraestructura, la situación del personal con bajos sueldos y la falta de contratación colectiva, además de personal que tiene entre 15 y 25 años bajo la figura de contratados, sin que la Corporación de Salud entregue los respectivos códigos para el ingreso a nómina fija.

La Intergremial de Salud, conformada por los Sindicatos Unitarios de Trabajadores de la Salud (Sutsea), de Empleados Públicos de la Salud (Sunep-Sas Aragua), Colegio de Enfermeros, Médicos y Bioanalistas; calificaron que el sector atraviesa la peor crisis y que se agrava por falta de respuesta del Ejecuto regional y nacional.

Infraestructuras por el piso

Víctor Maldonado, vicepresidente de Sutsea, detalló que en el Hospital Civil, primer hospital de Maracay e ícono en la ciudad; el personal fue trasladado a otros centros asistenciales dada las reparaciones que se realizaron en su fachada durante los trabajos de rehabilitación a los que fue sometida la Plaza Bolívar.

“Dentro del Hospital Civil no se realizó ningún trabajo que pudiese haber mejorado las condiciones mínimas para los trabajadores de ese centro de salud porque las áreas de consulta, historias médicas y odontología permanecen exactamente iguales”.

En su denuncia, aseguró que el Hospital Del Mar, ubicado en Ocumare de la Costa y reinaugurado a finales del 2015 por el Gobernador de Aragua, Tareck El Aissami; hasta ahora no presta servicio a los pacientes, no funciona a pesar de que fue reinaugurado con bombos y platillos según explicó Maldonado. La falta de insumos aparentemente es la causa de la paralización de ese nosocomio de rehabilitación a la orilla del mar.

La situación se extiende según Maldonado, a los ambulatorios del sur de Aragua: Camatagua, Barbacoas, San Sebastián, San Casimiro y Hospital del Sur.

“Están completamente abandonados, no tiene material de aseo, insumos, no cuentan con ambulancias porque no tienen cauchos, no hay bombonas de oxígenos ni extinguidotes, instalaciones en pésimo estado, baños sin funcionar”.

La Intergremial de Salud también incluyó la situación que atraviesa la Maternidad Integral de Aragua (MIA), que es sometida a reestructuración y los trabajos no culminan, además se habla de posible cierre y al personal se le obliga a redactar cartas de renuncia o de solicitud de traslados.

Otros de los centros asistenciales denunciados fue el Hospital de Las Tejerías, cuya inauguración se ha prometido en reiteradas ocasiones, se aprueba presupuesto y hasta desvalijan lo existente.

Laboratorio Regional del Centro: otro sistema en detrimento

Maldonado citó la situación que se presenta en el Laboratorio Regional del Centro, creado para satisfacer las necesidades de la población y que hoy ni siquiera cuenta con reactivos. En cifras indicó que para el año 2012 el laboratorio atendió a 17. 623 pacientes, pero en 2013 comenzó a bajar el número para ubicarse en 11.331, mientras que en el 2015 solo se atendieron a 5.925 pacientes.

“Las camareras deben llevar hasta su propio cloro para poder desinfectar el área, no hay manera de que se doten los centros asistenciales de insumos, materiales y artículos de limpieza”, condenó Maldonado.

Atrasos en la firma de la contratación colectiva

Desde el 16 de junio de 2015 se introdujo ante la Inspectoría del Trabajo el proyecto de contratación colectiva del sector salud. Hasta ahora no reciben respuesta porque el patrono no se sienta a discutir las cláusulas socioeconómicas que ampara al personal.

De este manera, los afectados se mantienen con sueldos y salario pírricos que no se adaptan a la realidad del país, señaló José Solano, secretario general del Sunep-Sas.

“Es necesaria la actualización de beneficios socioeconómicos, porque además de que no hay condiciones ni herramientas para laborar, los sueldos tampoco permiten hacer frente a la realidad que vive el país”.

5.400 trabajadores contratados en Aragua

Como una violación de la Ley Orgánica del Trabajo, calificó José Solano la situación en la que se encuentran 5.400 trabajadores de la salud en la entidad quienes se mantienen bajo la figura de contratados cuando el texto legal elimina esa condición.

A pesar de las diligencias ante la Corporación de Salud, no hay respuesta a la especie de tercerización, pues ni siquiera hay fecha para la entrega de códigos que finalmente especifican los cargos de nómina.

Pero a los contratados se les suma atrasos en la aplicación del nuevo sistema de jubilación que comenzó a regir desde el 1º de noviembre de 2015, de manera que aún hay personal con 25 años de servicio en espera de la jubilación con el 100 por ciento del salario integral.