Diáspora en Venezuela crece de manera alarmante luego de la ANC

La diáspora en Venezuela subió en las comunidades europeas residenciadas en el país.

Luego de la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente, el temor y la diáspora en Venezuela incrementó notablemente. Una prueba de ello son las largas colas que se pueden ver diariamente en las diferentes embajadas y consulados del país.

Los consulados de Colombia, España, Italia, Ecuador y Portugal se encuentran abarrotados por la gran cantidad de personas que tramita sus papeles para partir del país que los vio nacer.

A pesar de que Venezuela siempre se caracterizó por ser un país que le daba la bienvenida a todos los inmigrantes. Hoy, la realidad es otra, cada día que pasa el éxodo en el territorio nacional es más dramático.

Víctor Ramos es un joven de 25 años de edad, estudiante de Ingeniería en la Universidad Central de Venezuela (UCV), hace cuatro años salió del país en busca de un nuevo futuro, pero la nostalgia y la esperanza de una mejor Venezuela lo hizo volver. Actualmente, tramita su residencia española para abandonar por segunda vez la tierra que lo vio nacer.

“La primera vez me fui a Panamá, pero la tristeza me invadió y decidí volver pensando que esto iba a cambiar. Ahora con la Constituyente tomé la decisión de irme y no volver. Ya esto no tiene vuelta atrás, estoy tramitando mi residencia española para buscar un mejor futuro y una calidad de vida que aquí nunca voy a tener” aseguró Ramos.

Embajada italiana en Venezuela

Diáspora en Venezuela crece de manera alarmante luego de la ANC

En el caso de la Embajada de Italia los trámites para obtención de pasaportes aumentaron de manera alarmante luego de la Asamblea Nacional Constituyente, así lo aseguró el Cónsul General, Enrico Mora.

“Con la situación política y social actual que enfrenta el país, puedo decir que las citas para legalizar documentos aumentó 30% luego del 30 de julio” afirmó el diplomático.

Asimismo, Mora informó que debido a la enorme demanda existente en el país se hace “complicada” la situación para el consulado en el proceso de atender con inmediatez todas las solicitudes.

Para nadie es un secreto la inseguridad que se vive a lo largo y ancho del país y el temor que sienten los gobiernos extranjeros por el cuidado de sus ciudadanos y personal residenciado en Venezuela, es por ello que los controles escalaron en gran magnitud en los últimos meses.

Recientemente, el Gobierno de Portugal informó estar preparado para evacuar a sus ciudadanos en el país si la situación se complica, pero en este tema para Italia es mucho más complejo.

En una entrevista realizada al embajador italiano, Silvio Mignano, se confirmó que esta posibilidad es prácticamente imposible para cualquier país.

“Estamos hablando de que las comunidades europeas en Venezuela son muy grandes. En el caso de Italia existen más de 150 mil habitantes, se necesitarían 10 aviones diarios, algo que en Venezuela es absurdo que suceda, para trasladar a las personas y esto tardaría alrededor de 3 años para poder sacar a todos los ciudadanos. Realmente, no es una propuesta lógica” aseguró Mignano.

Pero no solo las instituciones diplomáticas europeas tienen gran afluencia de usuarios, los consulados de Colombia y Ecuador tienen la misma condición.

¿A qué se debe la diáspora en Venezuela?

La inseguridad y la incertidumbre son las primeras razones por las que los venezolanos emigran a otro país. De acuerdo con la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) el número de solicitudes de asilo presentadas por ciudadanos de Venezuela durante los primeros seis meses del año es casi el doble que en todo 2016.

El año pasado, 27 mil venezolanos presentaron solicitudes de asilo en el mundo entero, una cifra que ascendió hasta la fecha a los 52 mil.

«Estos datos representan solo una fracción del total de venezolanos que pueden necesitar protección internacional, dado que muchos no se registran como solicitantes de asilo, a pesar de que huyeron a causa de la violencia y la inseguridad, así como su incapacidad de poder sobrevivir», afirmó William Spindler, portavoz del ACNUR.