El periodista y activista político Carlos Julio Rojas fue imputado por un tribunal militar luego de permanecer 86 horas detenido sin el debido proceso.

Este miércoles el Colegio Nacional de Periodistas levantó su voz en torno al caso de la detención arbitraria del periodista y activista político, Carlos Julio Rojas, quien fue privado de libertad el pasado 6 de julio en San Bernardino, ya que Rojas se convierte en el primer comunicador venezolano en ser juzgado por un tribunal militar, el cual lo acusó de tres delitos: traición a la patria, rebelión y sustracción de elementos pertenecientes a la Fuerza Armada Nacional (FAN).

“El Colegio Nacional de Periodistas no está dispuesto a mediar y, mucho menos, a ceder la defensa de Carlos Julio Rojas absolutamente a más nadie”, dijo una de las representantes del gremio en rueda de prensa.

Periodistas y miembros de la sociedad civil, entre ellos la madre del detenido, formaron parte de la rueda de prensa en la sede del CNP, en Caracas, donde hablaron sobre las injusticias del caso. Elenis Rodríguez, parte de la defensa técnica del periodista detenido, explicó que a Rojas le sembraron cinco granadas cuando fue detenido. Aseguró que en el momento de la aprehensión solo llevaba una bolsa con cuatro kilos de papa.

Rodríguez comentó que, el Tribunal 2 de Control Militar no contaba con pruebas que demostraran que Rojas cometía algún delito de carácter castrense y, por eso, le atribuyen la sustracción de efectos pertenecientes a las Fuerzas Armadas.

“El cuento del delito de traición a la patria y la rebelión militar hasta un niño de primaria sabe que todo eso es mentira y totalmente falso”, denunció Rodríguez.

Rojas podría enfrentar una pena de 30 años solo por el delito de traición a la patria, y aún quedaría por definir la sentencia por los otros cinco delitos de los que le acusan. Actualmente se encuentra recluido en Ramo Verde y la defensa del periodista apuntó que  el tribunal militar que dictó la acusación debe presentar a Rojas en 45 días.

Por su parte, Sol Rojas, madre del periodista, denunció que el ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, ofreció 30 días de vacaciones a los funcionarios militares por la cabeza de su hijo. Además, aseguró que, cuando pidió una fe de vida de su hijo, le mostraron una foto de Carlos Julio Rojas esposado y en el piso.

La madre de Rojas aseguró que lo primero que le dijo su hijo al lograr verlo fue: “Mamá, hay que luchar”.

De igual manera, la organización no gubernamental Provea (Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos) afirmó que “alzarán la voz a instancias internacionales con el caso de Carlos Julio”.