El acoso y amedrentamiento de Corposalud contra personal termina en despidos masivos sin importar la inamovilidad laboral. 

La inamovilidad laboral se trata de un simple decreto, un papel que lo aguanta todo y que el primero en violarlo es el Gobierno Bolivariano de Aragua a través de Corposalud. Un total de 12 enfermeras adscritas al área de quirófano del hospital Dr. José Rangel de Villa de Cura, en el municipio Zamora, fueron despedidas en un acto retaliativo por denunciar la grave situación que se presenta en los quirófanos de ese centro asistencial.

No solo se violó la inamovilidad laboral de las enfermeras, sino que el despido se hizo sin el procedimiento respectivo que aplica en los casos del personal de carrera administrativa porque de esta manera Corposalud pretende callar la crisis de ese sector que se agudiza sin solución.

Yessica Vidal, vicepresidenta del Colegio de Enfermeras de Aragua, relató que el pasado viernes el gremio sostuvo reunión con el personal de quirófano en instalaciones del mismo hospital Dr. José Rangel.  Problema de infraestructura en quirófanos y escasez de insumos, activaron las alarmas de las enfermeras que solicitaron en encuentro con representantes del órgano colegiado. Personal de la dirección médica fue invitado a la reunión pero no asistieron a la convocatoria.

La mentira de los quirófanos

El personal expuso la mentira de la inauguración de los tres quirófanos de ese centro asistencial anunciado con bombos y platillos por el Gobernador Tareck El Aissami. La reapertura de los tres pabellones se concretó en 5 de diciembre de 2015 con una inversión de 80.995.302 bolívares, lo que beneficiará a más de 144 mil 754 habitantes de Zamora. Los trabajos de rehabilitación, adecuación, de adquisición de equipamientos y compresores (equipos de climatización) para los quirófanos se prolongaron por un año y dos meses, pero ninguno de ellos está en funcionamiento a pesar de que en su oportunidad El Aissami aseguró que eran los quirófanos más modernos de todo el estado Aragua.

 

Las enfermeras aseguraron que los quirófanos están inactivos.

Solo funciona un pabellón improvisado a un lado de la sala de parto, donde aseguran que no se manejan medidas de asepsia y antisepsia, al punto que hay una filtración de la cual sale agua espumosa. No hay lámpara cialítica de manera que deben trabajar con una lámpara auxiliar mientras que el aire acondicionado que debe estar en perfectas condiciones para evitar la proliferación de bacterias y agentes patógeneos, solo está a cargo de un split.

A esto se le suma la escasez de insumos y material médico quirúrgico para atender patologías de emergencia o urgencia que se presenten.

“En plena reunión se presentan jefes de vigilancia para notificar que debíamos desalojar las instalaciones del hospital por no tener autorización de la dirección para entrar».

«Hice caso omiso a eso mientras que desde la dirección del hospital mandaron a llamar a la coordinadora de enfermeras que se encontraba en el reunión. Cuando salimos del hospital se presenta problema de nuevo con los vigilantes, me dijeron que no podía entrar porque debía pedirle permiso a la directora. Les plantee que por contratación colectiva tenemos derecho a entrar a las instituciones de salud para reunirnos con el personal”, relató Vidal, representante del gremio de enfermeras.

La situación empeoró cuando a las 12 enfermeras de quirófano recibieron la notificación vía mensaje de texto: el lunes debían comparecer ante Coposalud, en Maracay, para reunión con el jefe de recursos humanos, Julio Sandoval. No se especificó motivo.

“En presencia de representantes del Colegio de Enfermeras, llegaron  dos representantes de Consultoría Jurídica, abogadas y sin preámbulos dijeron ‘Esto es rapidito muchachas, por reestructuración en Corposalud decidimos prescindir de sus servicios’. Así de sencillo, cómo se van a botar sin tener motivo, no hay restructuración y se trata de personal de carrera, en plena inamovilidad laboral, no se hizo el procedimiento que es la apertura de un expediente y la Inspectoría del Trabajo es la que tiene que calificar el despido. Reclamé el abuso y las asesoras legales solo dijeron que podíamos ir a ejercer acciones donde quisiéramos, ni siquiera entregaron la carta de despido y es absurdo que en este país se bote a la gente verbalmente, solo se limitaron a decir que lo entregarían en cualquier otro momento”, relató Yesica Vidal.

La representante gremial insistió que el personal de enfermería solo quiso salvaguardar la responsabilidad en caso de alguna eventualidad en el quirófano improvisado no apto para su uso y, dejar constancia de las condiciones infrahumanas en las que trabajan porque, según Vidal, quien no se maneje bajo la línea Psuvista recibe amedrentamiento, acoso, golpes en el sector salud de Aragua y ahora despidos masivos injustificados bajo plena inamovilidad laboral.