frontera colombo venezolanaPresencia militar redoblada y más puntos de control que ya habían desaparecido volvieron a verse en la frontera colombo venezolana por el Táchira.

Ninguna fuente policial o militar del país ha referido un plan especial de seguridad en la frontera colombo venezolana, pero con sorpresa muchos habitantes de las ciudades de Ureña y San Antonio del Táchira comenzaron a observar mayor cantidad de militares este lunes en la zona, y nuevos puntos de control se ubican en lugares donde ya no había uniformados.

Una fuente militar que pidió resguardo de su identidad, dijo que los crímenes que la semana pasada ocurrieron en las fronterizas en ciudades tachirenses obligó a la medida, para evitar que se generen más hechos de ese tipo.

El viernes pasado a final de la tarde 5 “supuestos paramilitares” fueron asesinados, de acuerdo a la versión oficial. Una mujer de 65 años de edad también consiguió la muerte a tiros la semana que pasó, cuando hacia una cola en un supermercado para comprar alimentos.

Un Guardia Nacional Bolivariano a quien se le preguntó por qué más militares y puntos de control, sólo se limitó a decir: “más resguardo para la población es todo, Colombia también tiene muchos militares del otro lado”, dijo.

Ureña, San Antonio y el CICPC

El reforzamiento militar enn la frontera colombo venezolana está replegado por los dos municipios fronterizos más dinámicos que tiene Venezuela, Pedro María Ureña y San Antonio del Táchira, sobre todo por sus zonas comerciales, pero también la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas -Cicpc- de Ureña amaneció reforzada de uniformados de la Guardia Nacional y la Policía Nacional Bolivariana.

Por barrios y localidades de Ureña y San Antonio del Táchira, también efectivos militares hacen recorridos con mayor constancia y se cree que con discreción, desde el fin de semana llegan más militares; pero aún el gobierno y la milicia venezolana no ha oficializado lo que todos observan, una nueva militarización de la frontera, comparada sólo con los primeros meses del cierre fronterizo, ocurrido el 19 de agosto pasado.