El vicepresidente de la República, Tareck El Aissami, informó que las panaderías  de Caracas deberán cumplir con una nueva normativa que les obliga a vender pan durante toda la jornada laboral.

El vicepresidente de la República, Tarek El Aissami advirtió que  las panaderías de Caracas que incumplan, serán ocupadas temporalmente por el Gobierno y será transferida a los Clap para ponerla a producir. Añadió que se desplegarán los equipos que fueron ya preparados por la Sundde, un equipo político para cada panadería, y además formado con un inspector para tener vigilancia y control permanente sobre las 709 panaderías de Caracas.

«Al final de cada jornada laboral deberá quedar pan elaborado para el día siguiente. La venta no podrá ser condicionada y mucho menos desplegar mecanismos ilícitos como el cobro de comisiones por puntos de ventas, entre otros», aseveró Tareck El Aissami.

Dentro de la normativa se establece que los referidos establecimientos deberán comenzar la venta a partir de las 7:00 am hasta el cierre del establecimiento; así como que el 90% del trigo distribuido por el Estado deberá ser utilizado para producir pan canilla, francés, sobado y salado.

La normativa también establece que las panaderías no podrán discriminar a los ciudadanos que solo vayan a comprar pan, por encima de aquellos que adquieran otros productos.

Igualmente, establece que el equipo de control debe verificar la capacidad productiva y humana, las maquinarias y equipamiento con el que cuenta el establecimiento; además, velar para que no exista el préstamo de materia prima entre panaderías, así como por la legalidad de adquisición de la misma. Al respecto, el presidente de la República, Nicolás Maduro, llamó a actuar con severidad ante los sectores que, según él, pretenden obstruir el acceso al pueblo a bienes de consumo diario, como el pan.

Reacciones

Esta medida adoptada por el Gobierno, inmediatamente trajo reacciones de dirigentes de la oposición, como el caso de Jesús “Chúo” Torrealba, quien explicó que el problema de fondo no es la hora en que se vende el pan ni la cantidad de establecimientos que lo expenden, el asunto crucial es que no hay la materia prima para elaborarlo.

Afirmó que para atender la demanda nacional de pan, el país necesita 120 mil toneladas mensuales de trigo para que sea molido en los 13 molinos operativos en el país. De esa cantidad, el Gobierno solo suele traer una cuarta parte , aproximadamente unas 30 mil toneladas, que es lo que consume sólo Caracas. La harina no es además el único insumo necesario para confeccionar el pan.

Torrealba también denunció la inaceptable amenaza de hostigamiento, “sapeo” y posible “toma” de las panaderías por parte de funcionarios y comisarios políticos de la tolda oficial.  Tales amenazas no son sólo una agresión contra los propietarios de las panaderías, sino que también agreden el derecho al trabajo de decenas de miles de venezolanos que laboran en estos establecimientos, y el derecho de millones de ciudadanos a comer pan.