La marcha del 7 de junio en Guayana llegó al punto de llegada, pero inmediatamente la GNB disparó lacrimógenas y perdigones.

Ni cinco minutos habían pasado desde que la marcha del 7 de junio en Guayana llegó a la Plaza Monumento de la CVG en Puerto Ordaz, cuando la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) inició la detonación de bombas lacrimógenas y perdigones contra manifestantes, dispersando a opositores que resultaron lesionados y afectados por efectos de los gases.

La marcha del 7 de junio en Guayana salió desde tres puntos: el Centro Comercial Atlántico, el Centro Comercial La Churuata y la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), donde previamente se efectuó una asamblea con la presidenta del Consejo Universitario de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Rafaela Requesens.

A la altura del Mc Donalds de Alta Vista se unieron las tres movilizaciones y luego se dirigieron de forma pacífica hasta la Plaza Monumento, militarizada por la GNB.

Pasada las 12 del mediodía continuaba la represión por parte de la GNB, atacando incluso a quienes se hallaban dentro del Centro Ciudad Alta Vista II, donde lanzaron bombas lacrimógenas. Otros manifestantes se resguardaron en edificios aledaños a la zona, algunos desmayados y otros heridos de perdigones.

Se conoció que una joven que no participaba en la marcha del 7 de junio fue herida con un objeto contundente en la cabeza, y trasladada hasta el Hospital Uyapar de Puerto Ordaz. Un policía también resultó herido. Un estudiante de la Universidad Bicentenaria de Aragua (UBA) fue retenido por la Policía del estado Bolívar (PEB) y liberado tiempo después.

Durante la asamblea estudiantil, Rafaela Requesens insistió en que a pesar de la represión continuarán ejerciendo la protesta de calle para impedir la realización de la Asamblea Nacional Constituyente, recordando que dentro del chavismo también hay detractores sobre esta convocatoria calificada de ilegal e inconstitucional.