Untitled design-5La Vereda del Lago se ha convertido en el escenario de asaltos. El pulmón vegetal de Maracaibo requiere vigilancia permanente.

Por años, la Vereda del Lago ha sido el sitio predilecto de propios y visitantes de Maracaibo, que buscan distraerse en todas sus áreas verdes, además de su excelente ubicación ante el estuario zuliano lo que la convierte en un punto de referencia de esa ciudad, sin embargo, en los últimos días se ha convertido en una guarida de maleantes que se aprovechan de la inmensidad del lugar para cometer sus delitos.

Rodrigo, quien lleva cuatro años ejercitando en la Vereda del Lago como cientos de marabinos, aseguró que hasta hace pocos meses asistía con un nutrido grupo de compañeros al caer la tarde, pero que este horario se ha disipado por la falta de un despliegue de seguridad en la zona.

¨Aquí uno se viene a esparcir, a correr, trotar, a hacer ejercicio, pero muchos hemos tenido que ajustar el horario porque la inseguridad se ha apoderado de estos espacios”.

Cintia Amenábar es otra marabina que acude a la Vereda del Lago a trotar, asegura que las horas en las que los usuarios deben tener mayor alerta son las de la mañana, pues muchos aprovechan los minutos antes de la salida del sol para iniciar las caminatas y es precisamente en la oscuridad de la madrugada cuando los maleantes entran a delinquir.

«Pasó una vez con tres chicas que venían a trotar desde temprano, aquí todos nos conocemos y pasó un carro, el tipo se bajó sacó un revólver y les quito sus cosas, nadie hizo nada, no había policía en el momento a pesar de que la sede está aquí mismo».

La Vereda del Lago también es usada para lo que se conoce como ‘enfriamiento de carros’ y es que debido a sus amplios estacionamientos y de la cantidad de automóviles que por ahí transitan, más de un vehículo, que ha sido robado dentro de la ciudad, va a parar en los espacios de ese parque.

Los vendedores de los diversos puntos de comida y bebidas también están en alerta permanente, pues en algunos casos no sólo han presenciado los robos, sino que también han sido víctimas, tal como lo indicó Ramiro Núñez, trabajador de la Vereda del Lago.

«Esto pasó a ser un desastre con la inseguridad, antes había recorrido policial, aquí no se perdía ni una aguja ¿Pero ahora? Desde que intervinieron la Policía de Maracaibo no se escucha ni una sirena aquí…, y en los baños ni hablar, pasa de todo, por eso mismo, porque ya no hay seguridad”.

Los usuarios de la Vereda del Lago piden que sean reactivados los puntos policiales para poder realizar sus actividades al aire libre con mayor confianza, además que se reparen las torres de iluminación de este parque para brindarles mayor seguridad a los visitantes durante las horas nocturnas.