votoAlcalde de Mara dispuso los recursos de la municipalidad para conspirar con el Plan República y permitir el voto obligado.

Lester Toledo, dirigente de Voluntad Popular, , denunció el abuso de algunos miembros de mesa, quienes obligaron a los electores a realizar el voto obligado en varios centros de votación en el municipio Mara, correspondiente al circuito número 3, atentando contra la Ley Orgánica de Procesos Electorales (LOPRE).

“Los testigos que están aquí conmigo han visto como desde la seis de la mañana están forzando a la gente a votar. Obligan a que a los electores los acompañe otra persona a la máquina e incluso marcan en la tarjeta por ellos, eso es un delito. El alcalde de Mara, Luis Caldera, es un delincuente electoral”, afirmó Toledo.
El dirigente de la tolda naranja expresó que los trabajadores de la Alcaldía y algunos militantes son chantajeados con despedirlos de su trabajo y, quitarles las ayudas sociales si no votan por los candidatos del PSUV. “Todos los votantes están siendo presionados y esto ocurre ante la mirada complaciente de los militares del Plan República, están recurriendo al terror psicológico para poder ganar”.

Toledo precisó que los denunciantes facilitaron pruebas en las que se observa como Mariel Montiel, funcionaria de la Alcaldía del municipio Mara, marcaba en la tarjeta por otra persona.

Amedrentamiento electoral

Una testigo de mesa en el liceo Sixto D´ Vicente, llamada Laura Palmar, expresó que intentó llevar a cabo su labor, pero las continuas amenazas de los miembros del PSUV le impidieron seguir dentro del centro: “Yo soy testigo de mesa y vi cómo se llevaba a cabo el voto asistido, me amenazaron con golpearme si no me quedaba tranquila. Trate de impedir que los electores votarán forzado pero me sacaron; esto es un atropello y el Plan República no hace nada al respecto”, señaló Palmar.

Por su parte, Luis Salazar, miembro de la junta parroquial de la Unidad en Mara, aseguró que fue testigo de cómo los militares agredieron a uno de los miembros de mesa cuando trato de impedir el abuso del voto forzado: “A nosotros se nos amenazó de que el voto iba a ser abierto, intentamos resguardar el voto secreto, pero el teniente Jimmy Pineda junto a la encargada del centro electoral Joselyn Silva sacaron a patadas al testigo de la mesa tres. No logramos impedir la situación y otro miembro fue golpeado en el estómago por el teniente”, informó Salazar.

Guarimba electoral

Mientras tanto en Maracaibo, a las afueras del colegio Carlos Rincón Lugo al oeste de esa ciudad, los oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana prohibían a las personas sacar sus teléfonos para tomar fotografías, mientras los electores protestaban debido al tiempo que tenían esperando para solucionar el problema de la máquina 4, que desde las 9 de la mañana no funcionaba.

A los electores les decían que se fueran y volviesen caída la tarde, ya que les cambiaron la máquina dañada, pero también está también presentó problemas y, emitieron un comunicado que decía que en tres horas aproximadamente les sería reemplazarían la máquina nuevamente. Los electores enardecidos por la problemática cerraron en medida de protesta una vía principal de la zona.

Al tiempo que en el Colegio Santa María en el circuito 7 de Maracaibo, al menos unos diez motorizados con capuchas, lanzaron bombas lacrimógenas a ese centro electoral, situación que generó confusión entre los electores que se encontraban en ese centro.

PSUV ofrecía carros por voto

Y como en todos los comicios no faltó el talonario de rifa que ofrece el PSUV a sus militantes, por llevar el 1×10, en el caso de San Francisco se dieron varios ticket para el sorteo, ya no de artefactos eléctricos, sino de un vehículo 0 kilómetros.