A raíz de las protestas en Caracas por falta de comida, muchos se han empezado a preguntar qué son los Clap. Muchos ven semejanzas entre esta nueva centralización de distribución de alimentos y las libretas de racionamiento cubanas.

Desde el pasado mes de abril empezó a funcionar en casi todo el territorio nacional, la distribución de alimentos regulados de primera necesidad a cargo del gobierno nacional, bajo la figura de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción, mejor conocido como Clap… Pero qué son los Clap.

A través de esta nueva figura, que funciona por medio de los Consejos Comunales, los representantes de éstos se encargan de vender bolsas de comida, a las personas que se hayan inscrito para obtener este “beneficio”.

Los Clap están integrados además por la Unión Nacional de Mujeres (Unamujer) y el Frente Francisco de Miranda; además el ministerio del Poder Popular para la Alimentación, ente encargadi de garantizar que los alimentos lleguen a los puntos donde serán distribuidos.

¿Qué registran los Clap?

Un miembro de cada familia, debe llenar una planilla con los siguientes datos:

  • Personas que integran las familias.
  • Edades
  • Enfermedades crónicas o discapacidades.
  • Si alguno produce algo y qué produce.

¿Qué contienen las bolsas de comida y cuál es su valor?

Las bolsas de comida que entregan los Clap, están constituidas por harina de maíz, harina de trigo, azúcar, arroz, pasta, salsa de tomate, mantequilla y alguna que otra vez pollo. La bolsa se vende con seis productos, algunos repetidos y no siempre son los mismos, por lo que costo varía.

Las ventas de estas bolsas de comida, se realizan cada 15 días, sin embargo, en muchas zonas del país las mismas han tardado hasta un mes en que se vuelva a repetir el operativo.

¿Medida para paliar el bachaqueo o tarjeta de racionamiento cubana?

El Gobierno nacional ha apuntado que la creación de los Clap se debe a un mecanismo de distribución alimentaria que acabaría con los bachaqueros (personas que compran los productos a precios regulados y especulan al revenderlos, aumentando su valor hasta en un 1000%) y eliminaría las colas en los alrededores de los locales comerciales. La semana pasada, luego de las fuertes protestas registradas en el centro de Caracas, se conoció la medida gubernamental de prohibir a abastos y supermercados, la venta de este tipo de productos, pues de ello se encargaría los Clap. Aunque Rodolfo Marco Torres, ministro de Alimentación aseguró que esta información es falsa, una fuente consultada por BBC ratifica la prohibición de la venta y la centralización de la misma en manos del gobierno.

Por su parte, el Movimiento Izquierda Democrática ve con alarmante preocupación esta medida, afirmando que los Clap se asemejan a la libreta de racionamiento cubana, a través de la cual los habitantes al mes pequeñas cantidades de alimentos.

Lisbeth Cordero, coordinadora de Izquierda Democrática en Caracas, explicó que este mecanismo de abastecimiento comunal es un fracaso anunciado, ya que la experiencia de distribución en los mismos son sinónimo de grandes ineficiencias : “es imposible que los Clap sean la solución, porque no hay suficientes productos para distribuir y para que fueran eficientes, tendrían que contar con una red logística y organizativa que pudieran atender a los más de 30 millones de habitantes aglomerados en unas 6 millones de familias que necesitan consumir los productos de primera necesidad todos los días. No son dos kilos de azúcar, dos de harina de maíz, 1 aceite y dos pollos lo que necesita una familia para mantenerse”.