La crisis en Venezuela

La crisis en Venezuela ha detenido el área de la construcción, pese a que ésta es un dinamizador de la economía porque mueve a sectores conexos.

José Hurtado, presidente del Sindicato Único de Trabajadores y Profesionales de la Construcción, Vialidad, Conexos y Similares de Anzoátegui, afirma que los 5.500 obreros  afiliados a ese ente en la zona norte de Anzoátegui,  están inactivos, mientras  los demás han migrado, unos hacia la economía informal y otros se encuentran están inactivos o «matando tigres», debido a que la crisis en Venezuela arropa a todos los sectores y la construcción no es la excepción.

Hurtado Fustiga la actuación del anterior gobernador, Aristóbulo Istúriz, hoy vicepresidente de la República y del alcalde de Barcelona, Guillermo Martínez, quienes habrían prometido villas y castillas durante la campaña electoral.

Recuerda que fue la reactivación del sector construcción uno de los ofrecimientos más aplaudidos, porque suponía que muchos obreros, técnicos y profesionales inactivos, tendría la opción de trabajar,  dado que la construcción dinamiza todo a su alrededor.

Advierte que entonces anunciaban que echarían a andar obras como el terminal de Barcelona, el cual simularon iniciar con tractores y movimientos de tierra, pero todo quedó en la colocación de la piedra fundacional.

«Lo que tienen es una burla con la gente, los trabajadores desde hace más de dos años están a la espera de que al menos la Misión Vivienda se active, pero ya pasó el primer trimestre del año y nada pasa, el estancamiento es evidente».

A lo dicho por el dirigente gremial, se suma el testimonio de Pedro Guaicuto, quien es obrero de la construcción, pero según explica, ahora se dedica a hacer colas, pero no por productos, sino por dinero.

Sostiene que cobra entre 1.000 y 2.000 bolívares a quienes por distintos motivos no pueden hacer la fila, acotando que es una labor angustiosa y agotadora, pero que pagan bien.

«Trabajar en la construcción es lo que me gusta, lo que sé hacer, pero si no tengo la posibilidad de ganarme el sustento ahí lo haré donde sea necesario, pero mi familia no pasará hambre», sostiene Guaicuto.

La crisis en Venezuela ahoga la iniciativa privada

La escasez de materiales de construcción aunado al su alto precio que exhiben el cemento, la cabilla y la arena, son elementos que atentan contra toda posibilidad de invertir en el área de la construcción y además reducen las posibilidades de empleo, porque la crisis en Venezuela es sistémica.

La crisis en Venezuela ha golpeado fuerte, el sector construcción ha sido muy vapuleado

Los dirigentes sindicales José Hurtado y Tito Barrero, de Fetranzoátegui y la Construcción

«Antes cualquier particular realizaba remodelaciones o ampliaciones, lo que permitía tener trabajo hasta por 4 meses seguidos, ahora todo cambió y no precisamente para bien», sostiene el presidente del Sindicato de la Construcción.

Afirma que aun cuando no se hacen grandes expectativas, el sector todavía  espera que pueda iniciarse  la construcción de unos  2 mil apartamentos en el sector  Nueva Barcelona del municipio capital a través de un convenio China- Venezuela, anunciado por voceros oficiales, lo que podría reactivar el empleo paralizado desde hace tres años y sin muchas esperanzas.

El segundo motor está apagado

El presidente de Fetranzoátegui, Tito Barrero, dijo ver con asombro el que representantes del Gobierno hagan alusión al área de la construcción como el segundo motor de la economía, pero no hacen nada para encenderlo.

«Ese motor está apagado y por los vientos que soplan, no tienen mucha voluntad para encenderlo, porque si lo quisieran, ya lo habrían hecho, pero todo apunta hacia lo contrario».