Foto: José Rafaél Vázques Mora con Diana López, hermana de Leopoldo López.

Tras la denuncia a la fiscalía de España en febrero, finalmente retornaron a su país los espías del gobierno de Venezuela, entre ellos José Rafael Vásquez Mora.

Luego de quedar al descubierto la labor de espionaje sobre opositores venezolanos en España por parte de espías del gobierno de Venezuela en este país europeo, fueron retornados a su país 16 militares quienes formaban parte de la Embajada de Venezuela en España. Entre ellos el teniente coronel José Rafael Vásquez Mora, hasta ahora el caso más emblemático de los espías del gobierno de Venezuela en Madrid tras conocerse su verdadera identidad, luego de que se hiciera pasar por estudiante y dar diferentes nombres cuando se presentaba entre opositores al gobierno de Nicolás Maduro.

José Rafael Vásquez Mora era adjunto a la Agregaduría de Defensa y había sido denunciado como uno de los espías del gobierno de Venezuela, con documentación gráfica, por entidades venezolanas en España. En febrero del presente año, el Ministerio de Exteriores español confirmó que él había realizado «actividades incompatibles» con su estatus diplomático en el país, por lo que se le hizo una advertencia a la Embajada de Venezuela.

Según un artículo publicado por el diario ABC de España, Nicolás Maduro cedió a las advertencias del Gobierno de España y a finales del mes de abril estos militares venezolanos, a cargo de Vásquez Mora, retornaron a su país de origen. En el texto se señala que fuentes ligadas a la Embajada de Venezuela aseguran que la medida también viene por la crisis económica por la que atraviesa Venezuela y no podían seguir costeando el pago del personal.

«No obstante, el hecho de que Vásquez Mora, denunciado ante Fiscalía española por «hostigar» a la oposición venezolana residente en Madrid, se haya visto afectado por este repliegue se explica por la incomodidad del Gobierno de Maduro cuando se desvelaron las actividades de ese militar y el grupo de presuntos espías a su cargo» reseña el artículo del periodista Emili Blasco.

Las fuentes consultadas por Blasco, revelaron además que el personal de la Agregaduría de Defensa en la delegación venezolana, quedó reducido a unas cinco personas, algunos agentes civiles del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional(Sebin). «Eso hace sospechar que las actividades de espionaje seguirán, aunque probablemente no se llegue a los niveles denunciados por la Asociación de Estudiantes Venezolanos en España, la Plataforma de Venezolanos en Madrid y la Asociación Civil de Venezolanos en la capital española».