Estudiantes de la Universidad de Carabobo protestaron por la inseguridadUn grupo de estudiantes de la Universidad de Carabobo bloqueó el paso en el Arco de la Bárbula en señal de protesta por la inseguridad que se vive en el campus.

Este miércoles, estudiantes de la Universidad de Carabobo, bloquearon el paso hacia el recinto universitario como medida de protesta ante los altos índices de inseguridad y violencia que se viven dentro de la casa de estudios de educación superior. Los jóvenes trancaron el paso específicamente en la avenida Universidad a la altura del Arco de Bárbula.

Los estudiantes cerraron el paso vehícular con cauchos quemados, para generar atención en los transeúntes. Los bachilleres denunciaron que el robo de equipos ha dejado a la institución sin suministro de agua y comedor. Asimismo indicaron que los robos dentro del alma máter, han afectado al departamento deportivo de la institución universitaria.

Usuarios de la red Social Twitter también reportaron lo sucedido en la Universidad de Carabobo.

#Protesta en el domo y arco por inseguridad en la #UC . Robos de equipos deja UC sin suministro de agua, sin comedor. Tomen sus previsiones”, escribió la cuenta @AvispateUC.

Esta no es la primera protesta que se genera en la Universidad de Carabobo en lo que va de año, el pasado 24 de enero, un grupo de estudiantes también cerró el paso vehicular con cauchos para exigir que esa casa de estudios de educación superior, no se sumara al paro convocado por la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (FAPUV), en esa oportunidad se produjo un enfrentamiento entre los manifestantes y funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana.

La grave situación económica y social que atraviesa el país, ha derivado en un incremento exacerbado de los índices delictivos en muchas ciudades, y las universidades no escapan de esa realidad, ya que muchas veces, los recintos educativos, son los principales blancos de las bandas delincuenciales que la mayoría de las veces roban equipos electrónicos como computadoras e incluso hasta los alimentos de los comedores, dejando a miles de jóvenes sin nada con que saciar el hambre para poder adquirir las energías necesarias que les permita prestar la atención debida a sus clases.