Este sábado 21 de abril, se cumplen dos meses desde que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a pacientes de nefrología del Hospital J. M. de los Ríos, donde el Estado venezolano no ha dado respuestas.

Las medidas que fueron enviadas el pasado 21 de febrero, exigen la necesidad de abrir un canal humanitario donde permitan el acceso a las medicinas y procedimientos médicos necesarios para salvaguardar la vida de los infantes.

Aunado a ello, piden la atención alimentaria necesaria para la recuperación de los niños, ante las constantes denuncias de que no ofrecen alimentos balanceados en el nosocomio.

La organización no gubernamentel (ONG), Prepara Familia, exige al gobierno de Nicolás Maduro garantizar el derecho a la vida de los jóvenes y asegurar las condiciones de salubridad y seguridad del área de nefrología, según los estándares internacionales.

Desde hace varias semanas, familiares de los pacientes del hospital han salido a las calles ante la preocupación de no conseguir los implementos necesarios para mantener a sus hijos.

Cabe resaltar que el viernes una cisterna tuvo que asistir al centro de salud para que atendiera a los pacientes de la Unidad de Hemodiálisis tras pasar varios días sin el servicio de agua.