El sueldo mínimo en Venezuela es de 392 mil 646 bolívares y el bono de alimentación o  cestaticket  es de 915 mil bolívares; lo que genera un ingreso mensual de un millón trecientos siete mil bolívares.

La canasta básica familiar venezolana se ubica en 35 millones de bolívares, lo que en comparación al sueldo base mensual no alcanza ni para cubrir el 1% de sus necesidades elementales.

Poder alimentarse se ha convertido en la principal preocupación y ocupación de todos los venezolanos, comer día a día es una lucha constante. Betty Pinzón dijo “vivo a punta de frijoles, haciendo cola para encontrar regulado y caminando bastante para no pagar transporte” explicó.

Ante la crisis económica donde cualquier producto base ya cuesta el millón de bolívares las cadenas de supermercados más conocidas han implementado el famoso “COMBO”. Esto consiste en gastar un monto tope comprando en el establecimiento y eso te da el derecho a adquirir el COMBO.

El famoso combo te puede traer por lo menos cinco productos elementales de la cesta básica, el costo va a depender de los productos que estén incorporados.  Por ejemplo: 1 pasta, 3 harinas de maíz, 1 azúcar y una mayonesa por 620 mil bolívares; si compras más de un millón docientos mil bolívares en el establecimiento.

Para Jessdan Gutiérrez su supervivencia está en limitar su manera de alimentarse a través de una estrategia “cada 15 días compro 5 kilos de arroz, granos y maíz y el resto de los días son verduras y cosas así” insistió Gutiérrez.

Los que tienen familias en el extranjero

Existen un alto porcentaje de personas que tienen familiares que migraron al extranjero y les envían remesas a sus seres queridos para sobrevivir.  Estos son unos de los pocos sectores de la población que todavía entran al supermercado a comprar y resuelven con los “COMBOS”.

Ludis Altamirano aseguró “mi esposo está fuera del país y me manda 15 y último y vivimos bien” afirmó.

Con el dólar paralelo que sube como como la espuma, las familias venezolanas con algún familiar en el extranjero que le envíe dólares o euros, cambian el dinero a bolívares y así es como puede solucionar sus necesidades.

Los que renuncian al trabajo

Otra de las estrategias de supervivencia aplicadas por los venezolanos para ahorrar, es renunciar al trabajo. Aunque parezca descabellado,  la escasez de efectivo y el poco que se consigue lo venden con el 100% y hasta el 120% de comisión, la falta de transporten y el sueldo miserable; son alguno de los factores que han influido en estas decisiones.

Pedro Landaeta afirma que el no trabajar es un ahorro. ” Si renuncias a tu trabajo donde ganas sueldo mínimo, te ahorras el pasaje y el jabón para lavar la ropa. No es lo mismo la ropa de casa, que la de ir  a trabajar ” explicó Landaeta.

Los venezolanos aseguran que gastan más saliendo a trabajar, que estando en sus casas sin trabajo y resolviendo como puedan; así se vendiendo helados chupis.

 Los que revenden o bachaquean para sobrevivir

El otro sector de la población que está sobreviviendo son los que se dedicaron al comercio y no cualquier tipo de comercio, sino la venta de productos de primera necesidad.

No hay ninguna tienda en el país de cualquier otra rama de negocios que no tenga al menos un producto de la cesta básica para ofrecer a la venta, ya que ante la crisis la prioridad es la alimentación y casi nadie gasta dinero en otra cosa que no sea la comida.

En las urbanizaciones clase media, todos sus habitantes tratan de vender algo para sobrevivir, bien sea torta, pan, huevo, verduras, jamón, queso, entre otros. Algunos tienen hasta punto, otros simplemente se mueven aceptando transferencias bancarias hasta para una fotocopia.