La constructora Duro Felguera invitó de vacaciones con los gastos pagados a altos jerarcas del chavismo después de haber recibido un contrato millonario.

Según fuentes confidenciales, el grupo Duro Felguera, quien desmintiera estar metido en negocios turbios con el régimen venezolano, nos confirman que esos casos de soborno a funcionarios chavistas encubiertos a cambio de contratos millonarios, es real.

Los jóvenes que forman parte de uno de los clanes chavistas más perseguidos por la justicia internacional, se instalaron en Madrid después de haber conocido España, esto gracias al viaje de lujo pagado por la constructora asturiana Duro Felguera, que sufragó todos sus lujos en unas vacaciones de ensueño.

La empresa española acababa de ser contratada por el gobierno chavista para poner en marcha una de las mayores eléctricas del país, valorada en mil millones de euros, y la adjudicación fue posible gracias a estos jóvenes, entonces recién aterrizados en la alta cúpula chavista, mejor conocidos como los bolichicos.

Con el poder llegó el dinero, y con el dinero llegaron los lujos

Luis Carlos de León, Adrián Requena Dugún y Ricardo Lugo Rodríguez pertenecían a la clase media acomodada de Caracas.

Formaban parte de un grupo de 15 jóvenes que se conocían desde sus primeros años en los mejores colegios privados y católicos de capital venezolana.

En cuanto a la planta eléctrica, pagada por el gobierno chavista, es la que en los actuales momentos tiene al país con apagones constantes y cronograma de racionamiento eléctrico ya que nunca ha funcionado a pleno rendimiento.