Según datos del Ministerio de Educación, desde 2014 la deserción escolar en Amazonas ha superado el 30%.
El Observatorio de Derechos Indígenas Kapé Kapé publicó un informe sobre los constantes reportes de deserción escolar en el estado Amazonas, debido a la falta de alimentación escolar, de combustible para el transporte fluvial de los estudiantes y los impactos socioeconómicos y culturales de la minería ilegal.
«Estas tres causas generaron que la Escuela José Gumilla, de San Fernando de Atabapo, tenga durante el año en curso una deserción escolar de 35%, según información aportada por profesores y demás personal de la escuela, en mesa de trabajo que organizó Kapé Kapé para tratar el tema», señala la organización.
Según del Ministerio de Educación, desde 2014 la deserción escolar en Amazonas ha superado el 30%. La proliferación de mafias para la compra y venta de combustible, afecta diariamente a cientos de indígenas que sólo cuentan con mecanismos fluviales para movilizarse.
A la dramática situación de alimentación escolar, añade Kapé Kapé, se le suma la imposibilidad de los indígenas de acceder al combustible a precios oficiales para poder transportar a los estudiantes entre las comunidades.
A raíz de esta irregularidad, la venta de combustible se cotiza en no menos de 10 millones de bolívares por tambor, precio imposible de costear para los habitantes de estas comunidades que viven tan sólo de la venta de productos artesanales y la cosecha de algunos alimentos a baja escala.
El observatorio indígena indica como otro elemento determinante en el aumento de la deserción escolar en Amazonas y otros estados como Bolívar, es la minería ilegal.
«El impacto que genera esta práctica incide directamente en la deserción escolar, bien en la ausencia de los alumnos en las escuelas, pero sobre todo en la ausencia de profesores, quienes vista la devaluación irracional de sus sueldos, se ven obligados a emigrar a los campamentos mineros y dedicarse a alguna actividad económica relacionada con esa práctica, explicó.