Habiendo conseguido de manera extraordinaria la organización no solo nacional sino mundial, para que los venezolanos expresaran su voluntad en contra del Gobierno y la Constituyente de Maduro el pasado 16 de julio, y la cual obtuvo casi 8 millones de votos, no nos cabe duda de que los venezolanos ya no somos los mismos.
Esta demostración de unidad en contra del menguado y mortecino grupo de parásitos que desgobiernan a Venezuela, les ha dado la estocada final que deja claro al mundo la fuerza de la sociedad venezolana, la que no esta dispuesta a abandonar la lucha y que la resistencia de los demócratas no tiene marcha atrás.
Llegados a este punto, todos los dirigentes políticos deben reflexionar sobre la urgencia de liberar al país de las garras del dictador y sus secuaces, para lograr la gobernanza que tanto necesitamos y exigimos por derecho absoluto estipulado en la Constitución.
El pueblo ha cumplido con las convocatorias realizadas por la MUD, ha manifestado su descontento hacia el Gobierno de Maduro, en las calles solo hay valientes intentando recuperar la soberanía y muchos han perdido la vida llenos de dolor pero sin miedo, ahora les toca a las caras mediáticas opositoras cumplir, no pueden despistarse, porque lo repito, los venezolanos ya no somos los mismos.
Queremos un Gobierno de Unidad para la transición, que no esté en paralelo al del castro-chavismo, que no esté a la sombra, mucho menos clandestino, merecemos transparencia, lealtad y el compromiso de que Venezuela no estará en manos nuevamente de una servidumbre voluntaria de partidos que buscan intereses propios en un juego político infame y no el bienestar para la nación.
Aún hay nieblas que no nos aportan confianza, porque la parafernalia del ilegítimo TSJ, el indigno CNE, y el defensor del puesto, siguen haciendo ruido a favor del régimen y su Constituyente, me imagino que son gritos de pánico, pero aún así teniendo en nuestra manos la preponderancia sobre ellos con la Asamblea Nacional y el Ministerio Público ¿Por qué no han actuado en conjunto con la celeridad que esta situación amerita si están dentro de la legalidad?
Los dirigentes opositores no pueden ser complacientes a Maduro cipayo de Raúl Castro, llevando las cosas poco a poco. Es inquietante lo que podría estar detrás de un gobierno de unidad nacional que anunció Ramos Allup, porque a mi entender pretenden explorar si hay la posibilidad de un gobierno de coalición tolerado para el gobierno de Maduro y esto sería una alianza que los verdaderos demócratas de Venezuela nos negamos a aceptar.
La potencia en las decisiones, en la dirección de la unidad y el liderazgo de los autores que nos representan deben ser contundentes y dejar enterrada la turbación, sabemos que no es fácil, pero es ahora o nunca, no se debe negociar con delincuentes porque podrías perder todo, no caigan en subterfugios que despierten la desconfianza del pueblo, repito, los venezolanos ya no somos los mismos.