La continuación de la historia de Luis Carlos Hueck Papita 2da. Base busca superar en números a la primera parte de la historia, que es la tercera con mayor recaudación en Venezuela

Tras un mes en cartelera, la cinta venezolana Papita 2da. Base alcanzó la cifra de 600 mil espectadores, superando a su predecesora que recibió a 500 mil personas en el mismo periodo de tiempo.

Luis Carlos Hueck, realizador del filme, se mostró complacido con la respuesta del público. “Ha sido increíble, estamos muy satisfechos con el apoyo por parte de tanta gente que ha acudido a las salas de cine y los cientos de comentarios que vemos a diario en las redes sociales. La cinta ha calado muy bien gracias a la chispa de los personajes y a la frescura del tema que plantea en un momento tan dramático como el que atraviesa el país, donde el humor es lo que más necesita la gente”.

Papita 2da. Base es la continuación del idilio entre Julissa y Andrés, pero esta vez contado desde la convivencia del matrimonio y la crianza de un hijo, con rivalidad deportiva incluida, pero un pequeño problema de memoria los hará vivir las más divertidas situaciones y pondrá a prueba la fortaleza de toda la familia, la amistad y el amor. La película continúa en cartelera en todas las salas de cine del país, tanto en Caracas como en el interior, en ciudades como Valencia, Maracay, Barquisimeto, Maracaibo, Puerto La Cruz, entre otras.

Dirigida por Luis Carlos Hueck, y protagonizada por Juliette Pardau (Julissa) y Jean Pierre Agostini (Andrés), el largometraje se ubica varios años después de la primera parte, en la que los personajes principales se conocen y enamoran pese a ser grandes rivales por sus equipos favoritos. Ella es ferviente seguidora de los Navegantes del Magallanes, además de hija del presidente del equipo; él es un fanático de los Leones del Caracas que sobrevive con ingresos exiguos.

Ya padres, ambos buscan sobrellevar de la mejor manera las dificultades económicas. Ella se mudó a la casa de él, un ambiente muy diferente a la opulencia en la que creció. Vive con buen humor el racionamiento de agua y el hecho de dormir con el hijo en el mismo cuarto mientras se escuchan tiros en la calle.

Durante la primera media hora, la película se concentra en las particularidades de esta nueva realidad, una situación que se torna más incómoda por la presión de Vicente Gallanes, interpretado por Jose Roberto Díaz, el papá de Julissa, quien no acepta que ella esté pasando tanto trabajo.