Cada 18 de noviembre Día de La Chinita toda la feligresía se congrega en la Plazoleta de la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá a ver a su Patrona.

Día de La Chinita, nuevamente y como cada 18 de noviembre oda  una feligresía chiquinquireña se congrega en la Plazoleta de la Basílica de Nuestra Señora  del Chiquinquirá con un mismo motivo, ser testigo del mayor acto de fe de todo el occidente de Venezuela.

Hace más de 300 años la aparición de una tabla con la imagen de la Santísima Madre se desplazaba por el que es considerado el primer servidor de maría, el Lago de Maracaibo, desde ahí y frente a los ojos de María Cárdenas la imagen tomó brillo siendo testigo de la aparición de Chiquinquirá.

“Le dio el lugar que le corresponde, escucho unos golpes y del ranchito donde estaba y ese 18 de noviembre salió una luz y se renovó la imagen ocurriendo el milagro, la Virgen nos dice que está aquí para socorrernos, ayudarnos, para darnos ese apoyo de Dios que todos están necesitados”, afirma Andrade.

Sus feligreses agradecidos por un milagro concedido acuden a diario a la Iglesia de San Juan de Dios a rendirle homenaje con una fe indómita a su Excelsa Patrona.

Ayde Picaza, una devota de La Chinita asegura que hace 26 años su hijo sufría de una patología en la columna por la cual era intervenido a diario, asegura que un día orando vio a la Virgen, sin saber que era ella, y que una amiga le dijo que La Chinita le haría el milagro “a los dos días los médicos me dijeron que no había que operar a mi hijo”.

Asimismo Laura Landaeta, otra devota de La Chinita asegura que le concedió el milagro de salvar a su nieta, quien hace dos años a sus cortos ocho meses le fue diagnosticado un problema cardiaco que debía ser operado y que tras ofrecerla en promesa se sanó.

“Cada vez que tenga la oportunidad de venir a agradecerle a LA Chinita lo haré, porque ella me hizo el milagro de tener viva a mi nieta, fue un milagro que la virgen me concedió a mí y a mi familia”, afirma Landaeta.

Por eso cuando entre gaitas y oraciones amanezca este 18 de noviembre y sea declarada la Basílica de Maracaibo como Santuario Zuliano están todos invitados a celebrar los 308 años de la renovación de la tablita con la imagen de la Virgen de Chiquinquirá.